El éxito de un negocio depende de algunos factores importantes, que involucran principalmente las llamadas habilidades gerenciales.
Asumir un rol gerencial, aunque es el objetivo de muchas personas, puede ser un desafío; después de todo, saber cómo liderar equipos de trabajo, involucrarlos y alentarlos para que se desempeñen bien no es una tarea fácil.
Es en ese sentido que se encajan las habilidades gerenciales, que son competencias desarrolladas que debe poseer un gerente para realizar una tarea específica en una organización.
Esto incluye la capacidad de desempeñar funciones ejecutivas, evitar o superar situaciones de crisis y resolver problemas en tiempo adecuado, así como la capacidad de mirar más humanamente la realidad de los empleados.
Todavía hay quienes piensan erróneamente que los gerentes son solo personas que tienen roles de liderazgo en una empresa. Sin embargo, no lo es.
Si estás planificando llegar a tener un rol gerencial donde trabajas, debes, en primer lugar, tener en cuenta que quienes ejercen cargos como gerentes primero deben ser líderes, en un sentido más allá de la jerarquía.
Además de los intereses de la empresa, esa persona necesita ser reconocida por aquellos a quienes dirige y debe llegar a lograr representar a todos.
Esto se debe a que los resultados de una empresa dependen directamente de la eficiencia de la gestión, ya que los líderes son los responsables de dirigir y organizar el trabajo de todos.
¿Cuáles habilidades gerenciales debes desarrollar para ejercer bien funciones de liderazgo?
Existen algunas habilidades gerenciales que actualmente son más valoradas por el mercado de trabajo. Las personas que las tienen, por lo tanto, suelen tener más éxito.
1. Buena capacidad de comunicación: quizás la más fundamental habilidad gerencial
A la hora de gestionar y liderar un trabajo en equipo, la buena comunicación se vuelve fundamental. Aquí nos referimos a saber comunicar la información deseada de forma clara y eficaz (sin crear ruido en las comunicaciones internas) y manteniendo un diálogo abierto con todos.
No olvides que la comunicación siempre debe ser bidireccional, es decir, escuchar a los demás también es importante.
Además, las buenas habilidades de comunicación son uno de los principales factores para evitar conflictos entre equipos y contribuir a la fluidez del proceso.
Se puede decir que un líder con buenas habilidades de comunicación ya garantiza en gran medida su éxito como gerente, ya que podrá involucrar a su equipo, dar retroalimentación precisa y comprometerse con el equipo en el desempeño esperado.
2. Habilidades conceptuales
Si bien es cierto que personas que trabajan en la gerencia deben saber comunicarse bien, también es crucial que sepan con claridad qué deben comunicar.
Por eso, manejar habilidades conceptuales involucra tener dominio y conocimiento teórico, además de poseer la capacidad de pensar críticamente y de manera abstracta.
Asimismo, se espera que una persona con buenas capacidades gerenciales sepa formar ideas con el objetivo de desarrollar una visión holística de un escenario organizacional, diagnosticar problemas y encontrar soluciones creativas.
3. Planificación y organización
Planificar sigue siendo la clave para el éxito tanto personal como profesional y empresarial. La planificación y la organización, entonces, debe darse para todas las etapas y departamentos de una organización.
En ese sentido, especialmente la comprensión de los diferentes tipos de planificación que conducen al éxito empresarial, ayuda a lograr resultados más efectivos dentro de la organización.
Por ejemplo, la planificación estratégica es especialmente responsabilidad de quienes son gerentes, ya que esas personas determinarán los objetivos de la empresa.
Asimismo, hace parte del proceso la evaluación de las condiciones externas e internas, las fortalezas y debilidades de la organización y también los plazos y desafíos a largo plazo que enfrenta el negocio.
Esta habilidad de gestión será una herramienta importante para los líderes, puesto que servirá como una herramienta para rastrear las principales acciones del mercado, e identificar mejor los principales objetivos de todos los departamentos, como ventas, marketing, finanzas, operaciones, etc.
4. Saber motivar también está entre las habilidades gerenciales
Un buen gerente o una buena gerente sabe que solo puede lograr los resultados deseados cuando todo el equipo es productivo y están todos motivados.
Al gerente le toca no solo mantenerse motivado, sino también incentivar y valorar el talento, reconociendo que el trabajo se está haciendo con excelencia.
Por simple que parezca, identificar a un empleado proactivo y proactiva en la resolución de tareas, por ejemplo, es lo que puede cambiarlo todo, y los directivos siempre deben estar pendientes de ello.
También necesita buscar alternativas para que todo el equipo mantenga un buen nivel de productividad, proporcionando en todo momento un clima organizacional agradable.
¿Cómo desarrollar habilidades gerenciales?
Hemos presentado qué es una habilidad gerencial y luego presentamos algunas de ellas, pero ¿cómo podemos desarrollar habilidades gerenciales?
Esas competencias de gestión pueden desarrollarse a través del estudio y la experiencia práctica como gerente y ayudarte a llevarse bien con tus colegas y saber cómo tratar con las demás personas del equipo, facilitando así el flujo de actividades en tu organización.
Para eso, en primer lugar, ten en cuenta que las funciones de liderazgo se tratan más que delegar tareas y preservar una jerarquía en la que estás en la cima de la pirámide.
Actualmente, se considera que el papel de un líder es comprender el contexto complejo de los demás. Y, a partir de eso, tomar las acciones más coherentes para que puedan realizar un trabajo enfocado y de alta calidad.
En ese sentido, algunas formas de desarrollar las habilidades gerenciales son:
1. Invertir en las relaciones interpersonales
Comunicar es fundamental, siendo así, trabaje para crear un entorno socialmente amigable donde las personas puedan estar más cerca, y genere resultados positivos para todos.
Mantenga, además, una comunicación clara y transparente, identifique los puntos de desacuerdo y resuelva los conflictos de inmediato.
Trabaje también para promover el respeto mutuo y permitir que todos los empleados tengan voz y participen de manera efectiva en el proceso de toma de decisiones.
2. Trabajar las fortalezas y debilidades es una de las habilidades gerenciales
Las fortalezas y debilidades juegan un papel importante en la identificación de las capacidades de cada persona. Esta información permite tomadas de decisiones más informadas sobre las asignaciones.
Profundizar en el análisis de rendimiento y garantizar mejoras en todo el equipo es, por eso, una de las más importantes habilidades gerenciales.